sábado, 4 de julio de 2009

Buceando en agua dulce



Tan lejos del mar como estamos, una buena forma de matar el gusanillo es bucear en aguas dulces. Con Jose Carlos, nuestro querido "dive master" vamos de vez en cuando a la cantera de Almendra, situada a unos 70 kilómetros de Salamanca.

La cantera es una mina abierta cuyo origen fue la extracción del material para la construcción de la presa de Almendra. Actualmente está llena de agua, formando un pequeño lago de una profundidad no superior a los 7 metros, donde se puede bucear.


La cantera (y la presa) se encuentran en las Arribes del Duero, entre Zamora y Salamanca. Desde Salamanca se llega a ella por la carretera de Ledesma (SA-300) y desde Ledesma por la carretera 303, y luego coger un camino, que está en bastante mal estado, por lo que hay bajar muy despacio con el coche.


Es un sitio muy tranquilo, con una pequeña playa para acceder al agua. En cuanto al buceo, es un lugar fantástico para hacer prácticas, porque la profundidad es poca y permite largas inmersiones. Esencial el control de la flotabilidad porque en cuanto tocas el fondo se levanta el fango y la visibilidad, ya escasa, se vuelve nula.

Y tras una buceada, qué mejor que una buena merienda: la tortilla de Nuria, la empanada de Jose y Beatriz, el embutido casero robado a mis padres y la grata compañía de la gente del club.



A falta de mar... bendita sea la cantera!!




2 comentarios:

  1. Cierto como se suele decir a falta de pan buenas son tortas. Pero mejor serán el domingo "dios mediante"en Castro.
    B

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  2. Verás tú el domingo la que vamos a liar en Castro... que al final vamos "tropecientosmil"... lo pasaremos genial, como siempre. Besos

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